Un cocodrilo de origen cubano y en peligro de extinción, confiscado en diciembre por las autoridades italianas, partió hacia Cuba como parte de los actos que anticipan la visita del Papa Benedicto XVI a la isla del 26 al 28 de marzo.Un cocodrilo cubano de una rara especie, que fue decomisado hace cuatro meses en el norte de Italia y donado simbólicamente a Benedicto XVI en enero pasado, fue despedido con todos los honores del Bioparco (zoológico) de Roma y devuelto a Cuba, coincidiendo con la visita del papa a la isla.
El cocodrilo, de 40 centímetros de largo, se volvió famoso cuando fue exhibido ante el Papa el 12 de enero pasado, durante un audiencia general en El Vaticano, en representación de los miles de ejemplares de animales que se alojan el zoológico de Roma.
Se trata de un ejemplar de la especie Crocodylus rhomfider, de unos 40 centímetros, conocido ya como "el cocodrilo del papa", trasladado al Bioparco de Roma, donde ha permanecido este tiempo recuperándose.
El animal, un ejemplar de la especie "Crocodylus Rhombifer", fue custodiado desde que la Policía se lo confiscó a un hombre que lo había introducido de manera ilegal en Italia.
El reptil será enviado al Zoo de La Habana, donde será sometido a un programa de recuperación física, con la mirada puesta en su devolución a su hábitat natural, según dijo en el acto el presidente de la Fundación Bioparco, Paolo Giuntareli.
Según informó el Bioparco, el número de Crocodylus rhomfider, un cocodrilo que vive en una pequeña zona de Cuba, se ha reducido en los últimos años en un 80 por ciento y, de acuerdo con la Unión Mundial para la Conservación de la Naturaleza, está amenazado.
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